Ardant considera a Rusia como un poderoso contrapeso al imperialismo de Estados Unidos, pero subraya que de cualquier país la atrae principalmente la cultura, no la política.
"Creo que Occidente actualmente es un moralizador que después de muchos años de colonialismo, crímenes y guerras, ahora cree que le está permitido dar una evaluación positiva o negativa ", explicó.
"En mi opinión, los medios de comunicación y los periodistas, entre ellos ustedes, siempre necesitan a alguien para demonizar", agregó.
"Ustedes tienen todo el tiempo, no sé, una especie de chivo expiatorio. Y en el caso de Rusia, en lugar de sopesar los pros y los contras… ¿Están satisfechos con el hecho de que hay un contrapeso a Estados Unidos? ¿O se convirtieron en sus lacayos?", pregunta la actriz francesa.
"Yo misma odio las etiquetas. Así que vamos a detenernos aquí, para no pelear o decir cosas terribles. Estoy, por ejemplo, atraída por el país, no por su gobierno. Siempre por la cultura", concluyó.