El cuerpo del Poder Legislativo planteó al Gobierno federal, del presidente Enrique Peña Nieto, "brindar recursos adicionales para la Cancillería, a fin de que las voces en el mundo reflejen que México no está paralizado", ante el próximo gobierno de Donald Trump, que emprenderá políticas en contra de los intereses del país latinoamericano.
El congresista mexicano señaló que ese empeño se hará en el marco de políticas de austeridad: "Es momento que todos estemos unidos, que todos hagamos este esfuerzo, y así lo empezaremos a ver no solo en el Senado, sino en otros organismos", subrayó al presidir el foro legislativo "Prioridades de México en la Agenda Multilateral 2017".
"El Senado de la República asume un compromiso también con los mexicanos, de reducir su gasto" para destinarlo a las prioridades nacionales del periodo que inicia, cuando el segundo tema dominante de la agenda nacional en el año —después de la relación con EEUU— será el impacto económico del aumento del precio de la gasolina.
La Cámara Alta reducirá más de diez por ciento sus gastos en servicios profesionales, nuevos vehículos, combustibles, telefonía, comunicación social, viajes y viáticos, "a fin de sujetarse a políticas de austeridad y disciplina presupuestaria".
El reto que persiste en México es también la pobreza, que afecta a casi la mitad de la población, ante la cual "la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible busca combatir la desigualdad y desarrollar las oportunidades para una mejor calidad de vida", prosiguió.
Finalmente el Senado de abocarse al nombramiento del primer Fiscal Anticorrupción, con "el diseño y modificación de una nueva fiscalía general autónoma que garantice la procuración de justicia y el combate a la corrupción", puntualizó.