Los líderes del bloque comunitario acordaron el pasado 15 de diciembre prolongar las restricciones económicas que vencen el 31 de enero de 2017 debido al poco avance en la implementación de los acuerdos de Minsk por parte del régimen ucraniano y las milicias de Donetsk y Lugansk.
"La Decisión entrará en vigor al día siguiente de su publicación en el Diario Oficial de la Unión Europea", reza el texto.
El Consejo de la UE prorrogó oficialmente las sanciones mediante un procedimiento escrito.
La medida afecta a los bancos con capital estatal y al sector petrolero.
La UE prohibió a sus inversores otorgar créditos a los cinco mayores bancos de Rusia (Sberbank, VTB, Gazprombank, Rosseljozbank y Vnesheconombank) por más de 30 días, entre otras limitaciones.
Desde el Kremlin han calificado de "absurdo" vincular las sanciones con la implementación de los acuerdos de Minsk, ya que Rusia no es parte del conflicto ucraniano.
Ucrania continúa desde abril de 2014 una operación militar en varias áreas de las regiones de Donetsk y Lugansk donde se proclamaron repúblicas populares tras el violento cambio de poder ocurrido en Kiev en febrero del mismo año.
Los acuerdos de Minsk, suscritos en septiembre de 2014 y en febrero de 2015, sentaron las bases para una solución política del conflicto y en particular estipulan la retirada de armas pesadas de la línea de separación y una tregua.
Sin embargo, tanto el Ejército ucraniano como las milicias de Donbás denuncian violaciones de los acuerdos y ataques casi diarios que han llegado a provocar más de 10.000 muertos, según datos de la ONU.