A la empresaria Sandra Seilz, de la ciudad alemana de Oberhausen, le encanta correr.
"Llevaba muchos años corriendo y pensando en cómo crear unos pantalones que protegieran a las mujeres de los violadores", cuenta Sandra.
El episodio clave que empujó a Sandra a dar forma a sus ideas se produjo el año pasado. Un día, mientras Sandra corría, tres hombres le bloquearon el paso e intentaron abusar de ella. Esta agresión, junto con los ataques que sufrieron muchas mujeres en Colonia durante la Nochevieja, impulsaron a Sandra a inventar los "pantalones cortos protectores" —o 'safe shorts', en inglés—.
"Estos pantalones aseguran una triple protección contra las agresiones sexuales y estamos muy orgullosos de ellos", señala la inventora.
En primer lugar, los cordones de los pantalones son resistentes al desgarro y a los cortes. Estos cordones, protegidos además con un candado, están en la cintura de la mujer, por lo tanto, resulta simplemente imposible arrancarlos o desatarlos.
En segundo lugar, esto pantalones están equipados con un altavoz: si se tira de la prenda, suena una alarma con una potencia de 130 decibelios, que ahuyenta al atacante. Esta señal puede ser activada por la propia mujer si se siente amenazada.
Por último, esta prenda dispone de una tela especial imposible de rasgar.
Pese a todas las medidas de seguridad, los pantalones cortos son cómodos y adecuados para el uso diario, asegura Sandra.
"Cuando uno se acostumbra a llevarlos, ponérselos y quitárselos es igual de fácil que los demás".
La empresaria destaca, además, que ya hay muchas personas interesadas en este invento, y que se le han agotado las existencias.
"La demanda es enorme. De momento, se nos han agotado todos. La producción del siguiente lote está en proceso y nuestro plazo de entrega es de seis semanas".
Según su creadora, estos pantalones ya gozan de tanta popularidad que los pedidos han llegado incluso desde fuera de Alemania.
La prenda para correr cuesta 149 euros, pero hay otro modelo por un precio más asequible, de 99,99 euros.
"Es una especie de ropa interior. Pueden ser usados bajo una falda o unos pantalones vaqueros", explica Seilz.