"La adaptación es un proceso permanente, debe efectuarse considerando los cambios que se operan en el mundo y en la propia CEI, y esta labor continuará", dijo reunido con los periodistas en Minsk.
El Consejo de los Jefes de Estado de la CEI en su reunión de septiembre pasado aprobó un documento sobre la adaptación de la Comunidad a las nuevas realidades, que se preparó a iniciativa del presidente de Kazajistán, Nursultán Nazarbáev, promovida en 2015 y apoyada por otros países de la CEI.
El secretario ejecutivo también señaló que los miembros de la Comunidad esperan que la presidencia de Rusia en la CEI en 2017 imprima un nuevo impulso al desarrollo de la cooperación en su seno, así como agradeció a Kirguistán su eficaz presidencia en 2016.
La CEI se instituyó en 1991 tras la desaparición de la Unión Soviética, no es una formación supranacional, funciona sobre el principio de voluntariedad como una organización internacional llamada a regular las relaciones entre los Estados miembros.