"El texto presentado ante el Senado hace parte del anexo 1° del Acuerdo Final para la Terminación del Conflicto y la Construcción de una Paz estable y Duradera", señaló la Presidencia en un comunicado.
Así, el proyecto busca que al menos 300 guerrilleros de las FARC (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia) señalados de rebelión y delitos como daño en bien ajeno, concierto para delinquir y porte y tenencia de armas de fuego puedan salir de prisión, incluso antes del próximo 30 de diciembre.
El texto radicado por ambos ministros deja claro que la dejación de las armas por parte de los guerrilleros será condición de acceso a la amnistía, y que una vez otorgada podrá ser revocada por solicitud de cualquier autoridad, "cuando se haya constatado que la persona volvió a delinquir con posterioridad a la firma del Acuerdo Final".
Esta vía rápida permite reducir de ocho a cuatro el número de debates en el Congreso legislativo para poner en práctica lo acordado con las FARC, emplear un procedimiento especial para adoptar reformas legales y constitucionales y, además, darle facultades especiales al presidente Juan Manuel Santos por seis meses para expedir decretos con fuerza de ley.
Se prevé que el Gobierno radique próximamente las iniciativas relacionadas con participación en política y lucha contra el paramilitarismo.