Los titulares de Defensa de los países de la OTAN reunidos el 29 de noviembre en Bruselas aprobaron la propuesta de enviar a Letonia, Lituania, Estonia y Polonia un batallón de la Alianza a cada una, anunció el secretario general de la Alianza Atlántica, Jens Stoltenberg, y también informó que varios países de la OTAN expresaron la disposición a participar en esta actividad.
"Rusia tomará en respuesta medidas adicionales, incluido el emplazamiento de armas y material de guerra que garanticen la protección incondicional de su soberanía", dijo el senador agregando que "se podrá instalar en el Distrito Militar Oeste una brigada más provista de sistemas de misiles tácticos Iskander M".
Además recordó que Moscú ya anunció el plan de desplegar dos divisiones adicionales en el Distrito Militar Oeste y una en el Distrito Militar Sur como respuesta a los pasos que da la OTAN.
El Estado Mayor General de Rusia está monitoreando la correlación de fuerzas en "la frontera ruso-otaniana" y no permitirá que la Alianza logre superioridad militar, afirmó.
Según el senador, la decisión tomada por la OTAN pone al desnudo sus objetivos auténticos, "porque ya no puede valerse de la amenaza iraní ni norcoreana para justificar esta acumulación de efectivos y material de guerra cerca de la frontera rusa".