La Defensoría exhortó "a la Fiscalía General de la Nación, a los jueces de la República y al Instituto Colombiano de Bienestar Familiar para que, conforme a sus competencias, investiguen, acompañen el caso y apliquen con rigurosidad lo que se establece en la Constitución y en la Ley de Infancia y Adolescencia".
El acusado, Rafael Uribe Noguera, de 38 años y miembro de una influyente familia de constructores de Bogotá, llegó en la mañana del domingo en su camioneta hasta un empobrecido sector de la ciudad y secuestró a Yuliana Andrea Samboni, de 7 años de edad, cuando la niña jugaba con una amiguita frente a su casa.
La desaparición de la niña fue reportada por sus padres a la policía, que siete horas después estableció su paradero en el apartamento del arquitecto.
Al llegar al lugar, las autoridades solo hallaron el cuerpo de la niña, mientras Uribe Noguera había sido trasladado por un familiar a una clínica para atenderse por una sobredosis de cocaína, y allí permanece custodiado por la policía.
La Secretaría Distrital de la Mujer ha tomado el caso, que será tratado como un feminicidio.
"Este hecho nos habla de la realidad del feminicidio en Colombia, es la máxima expresión de violencia contra la mujer y se presenta contra mujeres de todas las edades", dijo al diario El Espectador la abogada Isabel Agatón, asignada por la Secretaría Distrital de la Mujer para llevar el caso.
Agatón subrayó que la justicia, "tanto en el proceso como en la condena, debe ser ejemplarizante".
Yuliana Andrea Samboni, de origen indígena, llegó con su familia hace cuatro meses a Bogotá procedente de la convulsa región del Cauca (suroeste).
La madre, conmocionada por el crimen, permanece ingresada en un hospital.