La fecha fue establecida para sensibilizar a la comunidad mundial sobre la transmisión del VIH (virus de inmunodeficiencia humana que provoca el sida) y luchar contra los prejuicios sobre las personas infectadas.
Mientras el VIH se reproduce, el número de estos linfocitos se reduce gradualmente, lo que afecta la protección inmunitaria del organismo humano, que se hace más vulnerable a infecciones y cáncer.
De 1988 a 2004, la coordinación del Día Mundial del Sida corría a cargo del Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/sida (Onusida), que elegía un tema para cada año tras consultar con otras organizaciones.
Entre 2011 y 2015, la jornada internacional se conmemoraba bajo el lema 'Llegar a cero', de acuerdo con el objetivo fijado por Onusida: "Cero nuevos casos de infección por el VIH. Cero discriminaciones. Cero muertes relacionadas con el sida".
Este año, fue lanzada una nueva campaña, 'Levantemos las manos por la #prevenciónVIH', centrada en los diversos aspectos de la prevención del VIH y cómo afectan a determinados grupos, como las adolescentes y mujeres jóvenes, las poblaciones clave y las personas que viven con el VIH.
Según datos de Onusida, en el mundo hay 36,7 personas que viven con el VIH; entre 2010 y 2015 se registraban anualmente unos 1,9 millones de nuevos contagios entre adultos.
Desde el inicio de la pandemia, 35 millones de personas murieron por enfermedades causadas por el sida y alrededor de 78 millones adquirieron el VIH.
Onusida estima que el 57% de las personas con el VIH está al corriente de su situación, el 46% tiene acceso a la terapia antirretroviral y el 38% logró la supresión viral, es decir la cantidad del virus en su sangre es muy baja y eso les permite conservar la salud, tener una vida más larga y reducir la probabilidad de transmisión.
La ministra rusa de Salud, Veronika Skvortsova, situó en más de 100.000 los casos de la infección por el VIH registrados en 2015 y en 12.500, los muertos por la infección ese mismo año.
En octubre de 2016, el primer ministro ruso Dmitri Medvédev ordenó adoptar la nueva Estrategia Nacional sobre la Lucha contra el VIH hasta 2020.
El plan estatal tiene como objetivo disminuir los nuevos contagios y mejorar la atención médica a la población afectada.