De acuerdo con lo establecido en el contrato con el Gobierno, los S-400 fueron suministrados a las Fuerzas Armadas de la Federación de Rusia. Además de la entrega, se incluyeron en el documento maniobras de tiro en un polígono militar. En dichas prácticas, las unidades de los sistemas antiaéreos recrearon un combate contra un enemigo virtual en condiciones de interferencias en los radares.
El sistema de misiles antiaéreos S-400 Triumf es capaz de abatir objetivos aéreos de tecnología furtiva, misiles de crucero de pequeño tamaño y nuevos misiles balísticos tácticos y táctico-operativos.
Normalmente, un regimiento de sistemas antiaéreos está compuesto por dos divisiones. Una división equivale a un sistema antiaéreo, que por su parte está formado por ocho lanzamisiles.