Este aparato usa metano como combustible, lo que disminuye la generación del monóxido de carbono en cinco o seis veces comparado con los de gasolina o diésel, así como resulta 50% más barato su uso.
Es el motor de gas más avanzado de Rusia y rivaliza con sus análogos extranjeros.
Además, en los últimos años la planta, que pertenece al grupo automovilístico GAZ, logró lanzar la producción local de los componentes claves del motor, anteriormente fabricados en Europa, lo que permitió mantener el precio a un nivel asequible.
La alta calidad de los productos de la YMZ es reconocida por la empresa alemana Daimler, que equipa con sus motores los microbuses Mercedes-Benz.
Los motores YMZ de diferentes modelos ocupan hasta el 45% del mercado ruso. El grupo GAZ prevé promover el nuevo producto en el mercado extranjero.