Un estudio llevado a cabo por la Universidad de Strathclyde reveló que las personas del sexo masculino que tienen más masa muscular perciben mayores salarios que los hombres con bajo peso, informó Daily Mail.
El efecto fue más prominente en los empleados que dependen más de la fuerza física para realizar su trabajo, como los ejecutantes de tareas manuales y los obreros, los profesionales de la llamada 'industria de cuello azul'. Sin embargo, los 'trabajadores de cuello blanco' —individuos que trabajan en oficinas— también son afectados, en menor escala, por esa discriminación de peso.
"Es deprimente que, a día de hoy, la apariencia influya de alguna manera en el salario de una persona", se lamentó Jonny Gifford de Chartered Institute of Personnel and Development, una famosa empresa británica del área de recursos humanos.