Ocurrió el pasado junio, pero recientemente se ha dado a conocer la truculenta razón del fallecimiento, informa The Guardian.
Colin Scott, de 23 años, había estado buscando un lugar para nadar después de una larga caminata a través de una sección prohibida del parque. Iba junto a su hermana Sable. Según explican los especialistas que investigaron el incidente, los hermanos estaban buscando un lugar para practicar 'hot potting' —una manera ilegal de nadar en las fuentes termales del parque—.
Cuando llegaron los empleados del parque, partes de la cabeza de Colin Scott, restos de su torso y sus manos eran visibles en la fuente. "El consenso entre el equipo de rescate fue que el calor extremo de la fuente, junto con su naturaleza ácida, disolvió los restos", se aclara en el informe.