Se trata del nuevo vehículo de asalto Azovetz y del vehículo blindado Gekkon, según informa el portal Defence.ru.
Mientras trataban de encontrar los ejemplares robados, el constructor general y el jefe del servicio de seguridad de la empresa fueron tomados como rehenes por los asaltantes, que llevaban máscaras y vestían ropa deportiva.
Además, la empresa ha comunicado que este robo ha frustrado la entrega de tanques T-64 por parte del Ministerio de Defensa de Ucrania, que eran necesarios para la creación de un vehículo de combate de infantería pesado y del tanque T-Rex.
Posteriormente, también se dio a conocer que en lugar de sistemas ópticos de combate, los Azovetz tenían instalados aparatos de vídeo de los porteros automáticos.