Moscú espera que Washington renuncie a la persecución infundada de ciudadanos rusos

"Es un problema grave que irrita nuestras relaciones bilaterales con EEUU, es una parte de aquel legado complicado que deja la administración de Obama (Barack, presidente actual de EEUU) a sus sucesores (…), esperamos que antes de que la presidencia de Obama termine, Washington dé pasos al respecto para eliminar este factor irritante, ellos saben qué es lo que tienen que hacer para esto", dijo.

Dolgov expresó la esperanza de que "la administración del señor Trump (presidente electo de EEUU) haga las conclusiones correctas, estas prácticas ilegales terminen y las autoridades estadounidenses respeten y cumplan los derechos de nuestros ciudadanos".

El diplomático indicó que de momento hay una serie de casos semejantes en los que Moscú continúa trabajando, en particular se trata de Víctor Bout, Konstantín Yaroshenko, Román Selezniov y otros.

Bout fue arrestado en Tailandia en 2008 y entregado a EEUU en 2010, que lo condenó a 25 años de cárcel por el presunto intento de vender armas a las FARC, que la Casa Blanca cataloga como grupo terrorista.

Yaroshenko fue detenido en 2010 en Liberia por un supuesto intento de introducir un alijo grande de cocaína en EEUU, a donde fue trasladado más tarde, y a partir de 2011 cumple su condena en la prisión de Fort Dix en el estado de Nueva Jersey.

Selezniov fue arrestado por las autoridades estadounidenses en julio de 2014 acusado por robar información sobre las tarjetas de crédito, ganando así millones de dólares.

El lunes pasado tuvo lugar una conversación telefónica entre Trump y el presidente de Rusia, Vladímir Putin, en la que ambos políticos coincidieron en la necesidad de normalizar las relaciones ruso-estadounidenses.