"Si nuestro próximo presidente permanece atrapado en guerras caras en Oriente Próximo, los costes presupuestarios harán descarrilar cualquier esperanza de solucionar nuestros vastos problemas interiores", asegura Sachs.
Para sustentar sus argumentos, Sachs saca a relucir los siguientes datos estadísticos: según el Departamento de Defensa de EEUU, el país norteamericano contaba en 2010 con 4.999 instalaciones militares, 662 de las cuales se hallaban en otros países.
De acuerdo con el experto, actualmente EEUU está sufriendo lo que el historiador Paul Kennedy llamaba "la sobrevaloración de la capacidad imperial". El término imperio es el que más viene al caso para describir la manera en que EEUU utiliza su poder en el mundo.
Un imperio es un grupo de territorios cuyo control lo ejerce un único país. Aunque Washington no controla de manera directa muchos de ellos, sus Fuerzas Armadas se encuentran en decenas de Estados. Aparte de eso, la Casa Blanca interfiere constantemente en los asuntos internos de otros países para influir en sus respectivos Gobiernos.
Según un estudio del historiador John Coatsworth, citado por Sachs, EEUU forzó 41 cambios de régimen en América Latina entre 1898 y 1994. Es decir, el país norteamericano provocó el derrocamiento de un gobierno cada 28 meses.