A continuación se ofrecen datos sobre la compraventa de armas por China.
Según la misma fuente, los principales destinos de las exportaciones armamentísticas chinas en ese período fueron el Asia-Pacífico (6.155 millones de dólares), América del Sur y México (1.691 millones), África subsahariana (1.576 millones), Oriente Próximo (1.291 millones) y África del Norte (883,2 millones).
El principal importador del armamento chino entre 2008 y 2015 fue Pakistán (3.470 millones de dólares), país que encargó la mayoría aplastante de los cazas polivalentes chinos JF-17 Thunder.
El segundo puesto lo ocupa Venezuela (1.236 millones de dólares), que encarga principalmente aviones de entrenamiento; Birmania tiene el tercer lugar (1.185 millones).
El CACMA augura que entre 2016 y 2019 China exportará armas por un valor total de 5.351 millones de dólares; el Asia-Pacífico mantendrá su liderazgo en las importaciones desde ese país (3.181 millones de dólares), seguido por América del Sur y México (1.500 millones), África del Norte (340 millones) y África subsahariana (165 millones).
En cuanto a las importaciones, China fue el principal mercado de venta de las armas rusas desde comienzos de los años 90 y hasta mediados de la década 2000-2010.
La importación masiva del armamento ruso permitió a Pekín crear sus clones de casi todos los equipos militares fabricados en Rusia, lo que tuvo como consecuencia la baja gradual de las exportaciones bélicas rusas a China en los últimos años, consigna el CACMA.
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En 2008, China fue el destino del 21,84% de todas las exportaciones militares rusas, cifra que se redujo al 1,69% en 2015.
No obstante, entre 2008 y 2015, Rusia se mantuvo como el principal exportador de material bélico a China (7.090 millones de dólares), seguida de lejos por Ucrania (778 millones), Austria (40 millones), Italia (32 millones) y Suecia (16,7 millones).
