"Hemos decidido que los eventos programados de marchas para el próximo jueves sean suspendidos, (…) creemos que es sensato acatar a los fines de evitar cualquier choque, cualquier confrontación y la contaminación de este proceso que hemos denominado inicio del diálogo", añadió el parlamentario durante una rueda de prensa.
El Gobierno y la oposición tenían previstas dos movilizaciones para el próximo 3 de noviembre, ambas dirigidas hacia el Palacio de Miraflores (casa de Gobierno) que fueron canceladas a pedido de los mediadores del diálogo.
Al respecto, el presidente del Parlamento dijo que la oposición no teme a la reacción de sus seguidores por la suspensión del evento.
"No tememos nada, las direcciones políticas tienen que asumir con coraje las decisiones políticas, la gente percibirá como mucho más responsable hablar claramente y tomar decisiones claramente, que andar convocando eventos que pueden resultar en derramamientos de sangre y choques, que no llevarán a ninguna parte", argumentó el presidente del Parlamento.
Por su parte, el jefe de la bancada oficialista, Héctor Rodríguez, celebró que diversos sectores de la oposición hayan decidido unirse al diálogo, en el que figuran como mediadores representantes de la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR), y del Vaticano.

"Queremos reconocer el gesto valiente de un sector de la oposición que sin titubeos, que asumiendo los costos ha dicho, nos sentamos en la mesa y asumimos el diálogo como único camino", expuso.
Además, reiteró que el diálogo es el camino para resolver las diferencias políticas y evitar que estas culminen en actos irracionales.
Para el martes la Asamblea Nacional había citado al presidente Nicolás Maduro para iniciar un proceso de responsabilidad política el cual decidió suspender también en el marco del diálogo nacional.