"Sería imposible ejecutar un proyecto de este tipo sin que haya gente en desacuerdo con la estrategia", reconoció el ministro de Transporte, Chris Grayling.
Heathrow ha salvado un primer obstáculo asegurando el respaldo del Gobierno de Theresa May a la construcción de una tercera pista en sus instalaciones del oeste de la capital británica.
El consorcio propietario, con el grupo español Ferrovial como accionista principal, ha ganado la partida a su rival Gatwick en el mayor y más polémico proyecto de infraestructura de Reino Unido.
Zac Goldsmith, diputado conservador y ex candidato a la alcaldía de Londres, confirmó de inmediato su intención de renunciar a su escaño en Westminster.
El millonario parlamentario representa el distrito de Richmond, bajo la ruta de proximidad de los vuelos, y había amenazado con dimitir si el Gobierno aprobada la expansión de Heathrow.
Las recientes concesiones de la primera ministra, Theresa May, no han impedido una baja en el grupo parlamentario conservador, que puede dentar aún más su muy limitada mayoría en la Cámara de los Comunes.
Otros parlamentarios tories batallarán contra Heathrow desde sus escaños e incluso desde sus puestos en el gabinete May.
Este es el caso del canciller Boris Johnson quien prometió cortar con su propio fornido cuerpo el paso de las excavadoras que allanarán el terreno de la tercera pista.
"Sigo creyendo que la expansión de Heathrow nunca va a suceder", señaló la diputada tory Tania Matthis.
La primera ministra ha retrasado hasta el invierno de 2017 la votación final en Westminster del polémico proyecto.
La líder conservadora se opuso a Heathrow en el pasado y un ayuntamiento de su circunscripción al oeste Londres ha advertido que gastará 50.000 libras en desafiar la propuesta del gobierno.
La extensión de Heathrow lleva décadas sobre la mesa y fue inicialmente secundada por la administración laborista en 2003.
El proyecto tiene un coste estimado de obra de 16.600 millones de libras (unos 19.000 millones de euros al cambio actual) y un presupuesto de indemnización a los vecinos de la zona en torno a los 1.500 millones de libras.
La tercera pista permitirá aumentar el número de vuelos de 480.000 hoy día a 740.000.
El número de pasajeros crecerá de los actuales 80 millones a un total de 130 millones anuales.
Cerca de mil viviendas serán demolidas en la expansión del principal aeropuerto internacional y de vuelos de larga distancia de Reino Unido.
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