#Venezuela | PSUV reveló plan golpista de la derecha para derrocar a @NicolasMaduro https://t.co/ihYp3wAobY pic.twitter.com/eOi7cRAyA1
— teleSUR TV (@teleSURtv) 23 октября 2016 г.
La Asamblea Nacional se comprometió, además, a emprender acciones internacionales y de presión popular, según la resolución votada en el hemiciclo.
El acuerdo alcanzado en el Parlamento venezolano incluye la designación de nuevos rectores del Consejo Nacional Electoral (CNE) y de magistrados del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) de Venezuela, según informa El Tiempo. La sesión se desarrolló en un ambiente tenso y decenas de manifestantes partidarios del presidente Nicolás Maduro entraron en el recinto del Parlamento.
Pueblo chavista afuera de la Asamblea Nacional rechazó llamados de la oposición a generar un Estado paralelo. pic.twitter.com/8fnrsfVu4r
— Érika Ortega Sanoja (@ErikaOSanoja) 23 октября 2016 г.
Entre otros puntos, la medida exige a las Fuerzas Armadas venezolanas "no obedecer ni ejecutar ningún acto o decisión contrarios a los principios constitucionales", presentar una denuncia ante la Corte Penal Internacional contra los jueсes y rectoras del CNE y convocar al pueblo venezonalo a "la defensa activa de la Constitución, la democracia y el Estado de derecho".
Además, el acuerdo se propone estudiar a fondo un posible "abandono del cargo" del presidente venezolano Nicolás Maduro, que actualmente está realizando una gira por Oriente Próximo. El martes 25 de octubre, la Asamblea Nacional volverá a reunirse para ratificar los acuerdos adoptados este domingo 23 octubre.
"En Venezuela se ha dado un golpe de Estado continuado. Venimos a oficializar ante el mundo entero que hubo una ruptura del orden constitucional", afirmó el diputado opositor Julio Borges. "La Asamblea Nacional asume la responsabilidad histórica de restituir la democracia y la justicia del pueblo venezolano", añadió.
La Policía tuvo que custodiar el edificio de la Asamblea Nacional para evitar que se produjeran incidentes dada la presencia de manifestantes partidarios del presidente Nicolás Maduro en las inmediaciones del recinto que protestaban contra el referéndum revocatorio y sus impulsores.
Por su parte, Diosdado Cabello, primer vicepresidente del Partido Socialista Unificado de Venezuela (PSUV), acusó a la derecha del país de haber orquestado un supuesto plan violento que calificó como una nueva Operación Cóndor. Según denunció Cabello, los detalles de ese plan de desestabilización habrían sido hallados en el teléfono de un militante del partido Voluntad Popular detenido el pasado 18 de octubre con dos granadas explosivas y dos bombas lacrimógenas.
El jueves día 20, el Consejo Nacional Electoral (CNE) resolvió posponer la recolección de las firmas del 20% del padrón electoral, que permitiría a la oposición activar un referéndum revocatorio contra el presidente Maduro, luego de que tribunales regionales anunciaran medidas cautelares contra el proceso por presunto fraude.
Según el documento aprobado por la Asamblea Nacional, la decisión del CNE fue tomada "sin fundamentos sólidos e inconstitucionalmente" y representa un intento de "arrebatarle el derecho a revocar al pueblo venezolano, comprometiendo la paz y la estabilidad de la nación".
Para la oposición venezolana es importante llevar a cabo el referendo revocatorio en lo que resta del 2016, pues si la consulta se realiza este año y es favorable para la oposición, se deberán convocar nuevas elecciones presidenciales, mientras si se realiza en 2017, Maduro será reemplazado por su vicepresidente si el pueblo apoya revocar su mandato.