"No pienso renunciar al compromiso con los ciudadanos, asumo el riesgo", aseguró Puigdemont.
Sin embargo, el presidente considera que si le condenasen a pena de prisión por impulsar este referéndum "sería una barbaridad democrática inexplicable".
En cuanto a un posible pacto con el Estado español para impulsar esta consulta, lo ve "difícil".
"En democracia los ciudadanos siempre están por encima" de las leyes y, por lo tanto, "el referéndum será celebrado digan el que digan desde el Estado y las normas españolas".
La consulta independentista está prevista para septiembre de 2017 y ese es el objetivo de Puigdemont, que anunció que no volverá a presentarse como candidato en las próximas elecciones catalanas.
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