El juez Sérgio Moro, que instruye el caso, decretó para Cunha prisión preventiva, es decir, por tiempo indeterminado, ya que según la Fiscalía existe riesgo de fuga al tener recursos ocultos en el exterior; se espera que llegue a Curitiba esta misma tarde.
Por eso, desde entonces estaba expuesto a la justicia ordinaria, concretamente al juez Moro, que centraliza las investigaciones de la Lava Jato desde Curitiba.
Cunha está acusado de corrupción, blanqueo de dinero y evasión de divisas por recibir sobornos para facilitar negocios de Petrobras en Benín (África) y de esconder ese dinero en cuentas secretas en Suiza, que compartía con su mujer, Cláudia Cruz, que de momento también está imputada.
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Eduardo Cunha pertenece al mismo partido que el actual presidente de Brasil Michel Temer y fue una figura clave en la destitución de Dilma Rousseff, ya que fue él quien dio luz verde a que se iniciara al juicio político en la Cámara.