"No creo que sea resultado de un plan estadounidense a largo plazo; hoy están desesperados, se lanzan de un lado al otro", declaró en una entrevista a la agencia Anadolu.
Indicó también que "todo eso es admisible desde el punto de vista de la política exterior, pero sería bueno entender las razones de estas acciones".
EEUU en varias ocasiones prestó apoyo militar a las fuerzas kurdas en su lucha contra Daesh, el autoproclamado Estado Islámico, proscrito en varios países, Rusia incluida.
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Sin embargo, para Ankara, las Unidades kurdas de Protección Popular (YPG), el brazo armado del Partido kurdo sirio de Unión Democrática (PYD) que opera en Siria, son una extensión del Partido de los Trabajadores de Kurdistán (PKK), proscrito en Turquía como organización terrorista.