Más de 400 invitados nacionales y extranjeros hacen parte de las actividades, que finalizan este viernes, y que han servido también como una oportunidad para realizar intercambios con las experiencias internacionales, así como para diseñar propuestas específicas de trabajo de mediano y largo alcance.
"Esta una oportunidad única para conocer experiencias alrededor del mundo en las que la música ha sido un elemento facilitador de inclusión y reconciliación" señaló María Claudia Parias, presidenta de la Fundación Batuta, una de las organizadoras de la iniciativa.
Los asistentes han podido participar de mesas temáticas y talleres en diferentes locaciones del tradicional barrio La Candelaria, en el centro de Bogotá, relacionadas con los lineamientos para la construcción de paz y tejido social desde prácticas musicales, así como reflexionar sobre la música y la educación.
El Seminario convoca a músicos, profesores de música, estudiantes, líderes y gestores culturales, secretarios de cultura, personas vinculadas al ámbito artístico y público en general.