"Después de 34 meses del programa, hemos logrado que los productores garanticen —para los próximos cinco años- seguridad alimentaria con soberanía para los bolivianos, cuidando los bosques y la madre tierra", declaró el funcionario.
Escalante explicó que unos 1.900 pequeños, medianos y grandes productores agropecuarios (cerca de 14.000 familias), contribuyen a la producción de alimentos en Bolivia.
Asimismo, su director precisó que 33% de bosques talados fueron habilitados para la producción de trigo, maíz, sorgo y soya, mientras que 62% sirve para la crianza de ganado y la producción de leche y un 4% se destina a la actividad forestal.
Se ha contribuido al Tesoro General del Estado con al menos 30 millones de dólares provenientes del proceso de regularización en aquellas zonas donde se realizaron desmontes ilegales o los productores no cumplieron con la restitución del bosque, dijo Escalante.
"Estos recursos, producto de multas y sanciones a los productores que incumplen las normas, se invierten en programas ambientales y productivos", explicó.
El Gobierno boliviano ha logrado comprometer a los agropecuarios a producir alimentos de manera sostenida en los próximos cinco años asegurando además la reforestación de las áreas de bosque utilizadas.
Hasta la fecha se han reforestado 43.000 hectáreas de boque gracias a este programa.