"Hay una decepción, sin duda alguna, con la casa política en general. No se puede particularizar el partido A o B (…) La abstención realmente fue muy significativa. Por lo tanto es, digamos, un mensaje que se da a la clase política brasileña para que reformule eventuales costumbres inadecuadas", dijo Temer.
El PMDB sufrió un duro varapalo, especialmente en Río de Janeiro, uno de sus feudos, perdiendo la alcaldía y con su candidato, Pedro Paulo, desplazado a la tercera posición.
En São Paulo el golpe también fue significativo, puesto que la candidata del PMDB, Marta Suplicy, apenas logró el 10% de los votos y quedó en cuarta posición.
Temer restó importancia a estos hechos y subrayó que lo importante es la "capilaridad" que tiene su partido, lo que demuestra la extensión y fortaleza del PMDB en todo el país.
Sin embargo, este domingo acudió a votar en São Paulo una hora antes de lo anunciado, lo que muchos interpretaron como una forma de dar esquinazo a los activistas que tenían previsto manifestarse.
Temer se excusó este lunes diciendo que le surgió un compromiso de última hora y por eso cambió de opinión, y añadió: "Ahora bien, si había una protesta más tarde y yo la evité mejor para mí y para la democracia".
Tras su breve visita a Buenos Aires Temer recalará a última hora de la tarde en Asunción (Paraguay), donde mantendrá un encuentro con el presidente Horacio Cartes.