Según Matveev, las prácticas se centraron en los elementos de combate aéreo mediante el uso de armas tanto ofensivas como defensivas en altitudes extremas.
Un vídeo publicado al mismo tiempo muestra cómo se ve el proceso de despegue, vuelo y aterrizaje desde la cabina del interceptor supersónico ruso MiG-31, también conocido como Foxhound —cazador de zorros— según la clasificación de la OTAN.
El MiG-31 es un caza diseñado para la intercepción y aniquilación de aviones, misiles e incluso satélites de bajo vuelo a cualquier altura disponible. Su ficha técnica destaca por la capacidad de alcanzar alturas de 30.000 metros sobre el nivel del mar y volar a velocidades cercanas a los 3.000 km/h, más de dos veces la velocidad del sonido.