"Por supuesto que no", respondió el líder socialista en una entrevista en la Cadena Ser al ser preguntado si dejará la Secretaría General si los críticos tumban su propuesta el sábado.
El político asegura que su partido atraviese un problema "de fondo" que deben solucionar sus militantes.
Los socialistas españoles del PSOE se encuentran en uno de los momentos de mayor división interna de su historia reciente por las últimas debacles electorales, la posición respecto a los pactos de Gobierno y el liderazgo de Sánchez, muy cuestionado por una parte del partido.
Ante las crecientes críticas por parte de los líderes regionales, el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, anunció que convocará el 39 Congreso del partido y celebrará unas primarias en octubre.
Una facción del partido socialista, la que defiende el propio Sánchez, apuesta por construir un Ejecutivo alternativo al de Mariano Rajoy con otros partidos de izquierdas, mientras que otra parte del PSOE quiere abstenerse en la votación de Rajoy y quedar en la oposición.
El líder socialista no se plantea bajo ningún concepto abstenerse en la votación de investidura del candidato conservador.
"No voy a apoyar un gobierno de Rajoy. Para un demócrata unas elecciones nunca son una mala solución. Una mala solución es que se pueda indultar a un presidente como Rajoy", insistió Sánchez.
Esta cuestión será debatida este sábado en el Comité federal, en el que Sánchez instará a los críticos a presentar una alternativa en el proceso de primarias que se celebrará el 23 de octubre.
Los partidos españoles entran esta semana en el último mes de plazo para negociar un pacto que permita formar un Gobierno.
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Si a finales de octubre no se alcanzó ningún acuerdo, se convocarán elecciones automáticamente, probablemente para el 25 de diciembre, día de Navidad.