La granja de Joan Escolà se encuentra en la provincia de Lérida, Cataluña, y desde allí importa sus manzanas patrióticas a toda la comunidad autónoma. El sistema usado por el agricultor para 'tatuar' las manzanas es muy sencillo: cuando los frutos aún están verdes, el catalán les pega una plantilla. Esta zona, al no recibir el sol, no enrojece, y el resultado final es una manzana con la bandera catalana.
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Las manzanas de Joan Escolà se pueden conseguir en diversas fruterías de Cataluña y despiertan el interés tanto de los habitantes, como de los turistas.