"Como toda empresa petrolera del mundo, PDVSA enfrenta vicisitudes", dijo Del Pino en una entrevista radial.
En varios comunicados de los últimos días, Del Pino afirmó que PDVSA tiene cómo pagar a los tenedores que decidan no entrar en el canje voluntario de bonos.
Sin embargo, la calificadora de riesgos Standard & Poor's rebajó la nota de la deuda del PDVSA a grado "CC", en un panorama que calificó de "negativo", agregando que si el canje se realiza equivaldría a un inédito incumplimiento de los compromisos de la compañía.
Para el economista Tony Boza, entrevistado por Sputnik Nóvosti, la decisión de Standard & Poor's responde a una "estrategia política" que en las últimas décadas han utilizado los sistemas financieros globales para quebrar países, "como hicieron con Grecia".
PDVSA producía en septiembre del año pasado 2.587.000 de barriles diarios (de 159 litros), y el 16 de agosto de 2016 la producción cerró en 2.328.000 de barriles, según la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP).
Esto "evidencia una disminución de 259.000 barriles diarios", observó Casique.
Del Pino, por su parte, quitó entidad a esas cifras al alegar que responden a una información que la OPEP recibe de fuentes secundarias.
El canje que ofrece de los bonos de deuda que vencen en abril y noviembre de 2017 es por 7.100 millones de dólares y con vencimiento en 2020.
Pero Casique sostiene que CITGO "no es una garantía" para los tenedores de bonos.
Venezuela valuó a CITGO en 2014 entre 8.000 y 10.000 millones de dólares.
Pero, según la página web de PDVSA, CITGO tiene una deuda de 4.082 millones de dólares que, "sumados al endeudamiento del nuevo canje, sería superior al valor de venta de la empresa y por ende poco atractivo", sostuvo Casique.
Para Boza la realidad es otra.
A juicio del economista y analista, es "casi imposible" que PDVSA se convierta en una empresa insolvente.
"Tenemos un aval para los próximos 100 años: nuestras reservas", añadió.
Venezuela cuenta con el 20 por ciento de las reservas petróleo probadas del planeta, lo que la convierte en el país con el mayor depósito de crudo.
Hasta el momento PDVSA nunca ha caído en impagos.