El también expresidente de Andalucía tendría que hacer frente a un total de 42.147.014,94 euros que previsiblemente no tendrá en liquidez, por lo que será embargado, según anunció el Ministerio Público.
El magistrado dará un plazo a todos los encausados, incluido Griñán, para que garanticen el pago de sus responsabilidades y, si no lo hacen, "procederá el embargo de los bienes de cada uno".
La Fiscalía anticorrupción también solicitó la semana pasada seis años de prisión para el exministro del PSOE por un "supuesto delito continuado de malversación".
Además de los años de cárcel también solicita 20 años de inhabilitación por malversación y prevaricación en el marco del caso de los Expedientes de Regulación de Empleo (ERES) irregulares en Andalucía, una concesión de ayudas irregulares por valor de 855 millones de euros entre 2000 y 2012.
En esta investigación hay un total de 26 acusados, entre los que se encuentran los dos expresidentes y hasta seis exconsejeros de la Junta de Andalucía.
Anticorrupción entiende que las ayudas que se dieron estaban "al margen de la Ley de Subvenciones y de la Ley General de la Hacienda Pública".
"En muchos casos no existe ni solicitud por parte del beneficiario ni resolución de concesión por parte de la administración", señala.
Los dos exministros dimitieron hace dos meses de su puesto de diputado y senador y pidieron la baja voluntaria como militantes del PSOE, para evitar ser expulsados del partido.
Durante 19 años ocupó el cargo de presidente de Andalucía y fue ministro de Política Territorial y Administración Pública entre 2009 y 2010 y ministro de Trabajo y Seguridad Social entre 1986 y 1990.
José Antonio Griñán, de 70 años, fue presidente del PSOE entre 2009 y 2013 y ministro de Sanidad y Consumo, entre 1992 y 1993 y ministro de Trabajo y Seguridad Social entre 1992 y 1996, durante la legislatura de Felipe González.
Griñán también fue presidente de Andalucía entre el 2009 y el 2013, cargo del que dimitió en agosto de 2013, cuando ya se le empezaba a relacionar con la causa de los ERES.
Este es el caso de corrupción más grande en el que está inmerso el partido socialista, con decenas de imputados en Andalucía.