No obstante, algunos medios internacionales ya pusieron de relieve que Ofek 11 asegurará una mejor vigilancia de Irán, Siria y otros adversarios de la región.
Hassan Hanidzadeh, politólogo iraní y ex editor jefe de la agencia de noticias MehrNews, y Seyed Mohammad Marandi, experto en temas de América del Norte, comentaron a Sputnik la puesta en órbita del novedoso satélite espía israelí.
"Hace muchos años que Israel utiliza los sistemas de espionaje por satélite más avanzados en el territorio de Oriente Próximo y Asia Central. Anteriormente fueron lanzadas 10 modificaciones de Ofek", sostuvo Hanidzadeh.
Según Hanidzadeh, las acciones de Israel van contra el derecho internacional, que estipula que "los satélites deben ser utilizados solo con fines pacíficos" y no proporcionar deliberadamente una herramienta para el espionaje.
"Este tipo de acciones por parte de Israel pone en peligro la seguridad nacional de los países de la región", enfatizó.
"Para Israel no existe ningún límite —ya sean instrumentos de telecomunicación o recursos humanos— respecto a las cuestiones de espionaje y vigilancia", concluyó Hanidzadeh, agregando que "EEUU le proporciona todo el apoyo posible".
Marandi, por su parte, destacó que es poco probable "que Israel disponga de tecnologías propias para la construcción de satélites avanzados".
"Pero EEUU sí que las tiene y siempre está dispuesto a compartir sus datos de inteligencia sobre Irán, Siria, Líbano y los palestinos de la franja de Gaza con Israel", precisó.
Asimismo, subrayó que, a pesar de "ponerse de acuerdo [sobre esta política] con algunos regímenes árabes dictatoriales", la política de Jerusalén se ha convertido en algo "inaceptable para los ciudadanos de toda la región".
"Las autoridades de Israel tienen que recordar a qué condujo la práctica del apartheid en Sudáfrica", concluyó.