"La creación del Estado Mayor [de la Defensa europea] será un paso importante por sí mismo. Pero hay que determinar sus funciones y su nivel de autonomía. Estos factores son esenciales en la evaluación del poderío del futuro Ejército. Para 2018 debemos determinar nuestras prioridades y amenazas, y acordar qué acciones efectuaremos y que será aceptable para usar la fuerza", dijo la fuente al medio.
Agregó que una de las cuestiones principales es la de la financiación de las operaciones y misiones.
El documento elaborado por los expertos de Alemania y Francia subraya la necesidad de proteger el espacio Schengen en el marco de la Unión Europea de Defensa. Esto supone la fundación de un nuevo centro de mando, que prestará apoyo al funcionamiento de las unidades militares en el ámbito de la ayuda médica, logística y el uso conjunto de los activos militares.
"El Ejército Europeo se viene planteando desde hace mucho. Esta cuestión volvió a ser parte de la agenda tras el Brexit. Claro que nosotros no podemos tomar esas decisiones", aseguró el coronel Dalmau, representante de Eurocuerpo.
Dalmau explicó que el Eurocuerpo es un organismo militar que responde ante los políticos, el llamado Comité Común, que consta de los representantes de los ministerios de Defensa y las cancillerías de cinco países: Alemania, Francia, Bélgica, Luxemburgo y España.
El Eurocuerpo consta en la actualidad de 10 países. Cinco de ellos son el núcleo de este organismo, mientras que otros cinco —Italia, Grecia, Polonia, Rumanía y Turquía— son miembros asociados que tienen derecho de decisión. Sin embargo, todos los miembros del Eurocuerpo toman parte tanto en las misiones europeas internacionales como en las misiones desempeñadas por la Alianza Atlántica. A día de hoy, los soldados de la unidad están desplegados en la República Centroafricana, Kosovo y Afganistán.