"Si el Rey quiere corona, corona le daremos; que venga a Barcelona y el cuello le cortaremos", recogió la CUP de Barcelona en su cuenta de Twitter.
— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) 11 de julio de 2016
La CUP es un partido político anticapitalista e independentista que sostiene el Gobierno de Carles Puigdemont en Cataluña debido a que la coalición Junts Pel Sí no cuenta con mayoría en el Parlamento.
Estos hechos tuvieron lugar en una concentración convocada por organizaciones anticapitalistas y no en los actos más multitudinarios de la Diada, que fueron convocados por la Assemblea Nacional Catalana y Òmnium Cultural.
Los organizadores de la marcha anticapitalista, entre los que se encontraba la CUP, estiman que contó con una asistencia de unas 5.000 personas.
Durante la marcha también se quemaron banderas españolas y europeas.
Tras conocer la decisión de la Fiscalía de investigar estos sucesos, la concejal de la CUP en el Ayuntamiento de Barcelona, Maria Rovira, afirmó que su formación "no tiene miedo" y que volverían a hacerlo.
A su modo de ver, la apertura de una investigación ilustra el carácter antidemocrático del Estado español.
Maria Rovira afirmó que la quema de fotos de Felipe VI son un "acto reivindicativo" que sirve para recordar que "los catalanes no tienen Rey".