Gideón Remez e Isabela Ginor aseveraron que hallaron que Abás era agente de KGB en Damasco como el funcionario de la Organización para la Liberación de Palestina —OLP—.
Según dicen, el documento menciona a Mahmud Abás —que aparece bajo el apodo Krotov— quien nació en 1935 en Palestina.
Pero en estos documentos al mismo tiempo no hay ninguna 'información' sobre la fecha de su reclutado ni siquiera sobre qué tipo de tarea desempeñaba.
Los representantes de la administración palestina tacharon de denigrantes estas acusaciones al recordar que entonces la OLP colaboraba estrechamente con la Unión Soviética por lo que el país comunista no necesitaba escurrir un agente en el ente.
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Cabe señalar que Rusia por su parte nunca rechazó la filtración de los datos hecha por Mitrojin, pero Moscú siempre ponía en duda su credibilidad o su autenticidad ya que el fugitivo era solo un empleado ordinario y no podía hacer copias de dichos documentos de manera libre.
Ninguno de los documentos de Mitrojin es un documento real del servicio secreto soviético ya que representa su interpretación de los archivos, posiblemente exagerado para aumentar su 'precio' para un eventual comprador, opinaron los historiadores y los veteranos de la KGB en varias ocasiones en las entrevistas a los medios rusos.
