Ante la escasa venta de entradas el ex director de marketing de los Juegos de Londres 2012, Greg Nugent, ideó esta campaña para recaudar fondos con los que comprar entradas para jóvenes locales. El objetivo es pasar de los 300.000 dólares para comprar alrededor de 10.000 entradas.
Fuentes del palacio de Kensignton informaron de que el príncipe Harry hizo una donación –la cuantía no fue especificada—y que el miembro de la familia real inglesa estará muy pendiente de los resultados de los atletas británicos.
Harry hizo el servicio militar en Afganistán y al volver a Inglaterra fundó el Invictus Games, una competición pensada para militares heridos en la guerra; once de esos soldados estarán en los Juegos Paralímpicos de Río.
Prince Harry has made a personal donation to #filltheseats so Rio kids can see Invictus & Paralympic competitors in action. Enjoy the games!
— Kensington Palace (@KensingtonRoyal) 6 de septiembre de 2016
La campaña #FillTheSeats también cuenta con el apoyo de la banda británica, que a finales de agosto expresó a través de Twitter: "Increíble idea: mandar a niños brasileños a los Paralímpicos".
Check out #FillTheSeats campaign to get Brazilian kids to see Invictus & all #ParalympicsRIO2016 action for free: https://t.co/2hMbXJbqDB
— Kensington Palace (@KensingtonRoyal) 5 de septiembre de 2016
Las imágenes de los estadios medio vacíos fueron una de las críticas más recurrentes de los pasados Juegos Olímpicos y la situación podría ser mucho peor en los Paralímpicos.
La organización solo ha conseguido vender 1,5 millones de entradas del total de 2,5 millones de ingresos disponibles.