"Una solución equivocada al problema no ayudará a garantizar la estabilidad estratégica en la región y puede agravar los conflictos existentes", dijo Xi citado por Xinhua al reunirse con Park en los márgenes de la cumbre del G20 en Hangzhou.
El pasado día 2, la portavoz oficial del Ministerio chino de Exteriores, Hua Chunying, ya dijo que su país se pronunciaba "enérgicamente" en contra de la decisión de Seúl de desplegar en su territorio componentes del THAAD.
La diplomática indicó que para solucionar la situación en la península de Corea es necesario mantener diálogo y consultas, así como pidió respeto a "los intereses y la seguridad estratégica de China".
El pasado julio, Seúl y Washington lograron un acuerdo para desplegar en territorio surcoreano una batería THAAD, que se haría operativa a finales de 2017 como muy tarde.
Tanto Seúl como Washington reiteraron que el THAAD solo pretende contrarrestar la amenaza norcoreana, pero Pekín y Moscú sospechan que en el fondo EEUU busca aumentar su presencia en la zona y vigilar los sistemas de defensa ruso y chino.
El sistema THAAD (siglas en inglés de Defensa Terminal de Área a Gran Altura) está diseñado para detectar misiles balísticos con radar terrestre e interceptarlos a una altitud de entre 40 y 150 kilómetros.
Una batería THAAD incluye un radar TPY-2 TM, seis lanzadores, 48 misiles interceptores y un punto de mando.