El mandatario mexicano admitió en un acto en el Palacio Nacional "el incremento de la incidencia delictiva en el país", sin embargo dijo que está focalizada y que únicamente en 50 de los 2.500 municipios de México el número de homicidios dolosos fue superior durante estos primeros siete meses del año, en comparación con el mismo período del año pasado.
"En pocas palabras, en solo el 2% de los municipios de todo el país se están cometiendo el 42% de los homicidios dolosos", dijo el mandatario.
Ante ese balance, de manera corresponsable con los gobernadores y los presidentes municipales "reforzaremos las acciones de prevención social, fortalecimiento institucional y combate a la violencia en estas demarcaciones", dijo el jefe del poder Ejecutivo.
El presidente exhortó a los gobiernos provinciales y locales a "asumir la obligación y el compromiso de encabezar los esfuerzos para brindar mayor seguridad a los habitantes de sus entidades".
Las fuerzas federales estarán en las provincias asoladas por la violencia donde se necesiten "para ofrecer respaldo a las policías locales, de manera subsidiaria y temporal, no para suplirlas y reemplazarlas", dijo Peña en la reunión a la cual asistieron miembros del Congreso, del Poder Judicial, gobernadores provinciales y representantes de la sociedad civil.
Ante ese reto, convocó a trabajar en seis temas clave: una reflexión sobre la importancia del Consejo Nacional de Seguridad Pública, la implementación del Sistema 911 de atención a emergencias, el programa nacional de prevención social de la violencia, la implementación del sistema de justicia penal acusatorio, la aplicación del mando único establecido en la reforma constitucional en seguridad pública y el reconocimiento del papel de las Fuerzas Armadas en la lucha contra el crimen.