"En los pueblos, en los barrios, en las calles, siembre que sea posible, tratamos de organizar un espacio que la gente pueda utilizar. Analizamos estos sitios para asegurarnos de que, primero, sean abiertos, y segundo, que estén secos. Se requieren unas condiciones normales para permanecer en los refugios. Tratamos de reunir todo lo necesario: velas, fuego y, de ser posible, agua", ha contado al diario ruso el alcalde de la capital de la autoproclamada República Popular de Donetsk (RPD), Ígor Martínov.
El jefe de la RPD, Alexandr Zajárchenko, ha corroborado a los medios que la organización masiva de refugios se debe a la ofensiva, según sus datos, planeada por las Fuerzas Armadas de Kiev.
En marzo, se dio a conocer una potencial llamada a filas en Ucrania en lo que resta del año 2016 que, sin embargo, "dependerá de la situación en el frente" —o sea, en la región de Donbás—, según el presidente ucraniano, Petró Poroshenko.