Previamente se informó de 28 muertos y más de 180 heridos.
De acuerdo a una fuente militar, citada por Reuters, las tropas libias lograron avanzar considerablemente durante la ofensiva, pero resultó muy difícil hacerlo debido a los ataques suicidas, bombardeos y minas.
Este domingo, los militares libios lanzaron una amplia ofensiva contra las últimas posiciones de los islamistas en Sirte, ocupada por Daesh.
En la ofensiva participan las fuerzas leales al Gobierno de unidad nacional de Libia, principalmente destacamentos armados de la ciudad de Misurata, en noroeste del país.
Los milicianos de Daesh (autodenominado Estado Islámico, proscrito en Rusia y en muchos otros países) habían ocupado Sirte y una parte de la costa mediterránea de Libia en 2015.
Desde entonces casi toda la población civil –unas 80.000 personas– abandonó la ciudad.