La próxima calificación de la deuda soberana de México dependerá de la dimensión de la inyección de liquidez de fondos federales, que será determinante para la nota soberana de México, según los analistas de la firma.
Entre las amenazas el elevado endeudamiento del Gobierno y su petrolera, dijo en el seminario anual de Moody's, el analista de soberanos para América Latina de la calificadora financiera, Jaime Reusche.
Una inyección de liquidez de parte del Gobierno no incrementaría más presión en la deuda pública de México, que al cierre de 2016 será de 45% de Producto Interno Bruto.
El margen de maniobra para las autoridades se ha reducido a partir del tamaño de la deuda y el suave crecimiento de la economía mexicana, y "la inyección de liquidez a Pemex se ha convertido en un importante factor de riesgo".
La exposición de cartera de crédito por el capital de los bancos mexicanos comprometido con Pemex y sus proveedores es de casi 40%.
"Si hay pérdidas en el sector petrolero podría presentarse un deterioro significativo en las carteras de los bancos", alertó la calificadora financiera.
Las aportaciones de Pemex al presupuesto federal, bajó de representar más de 30% a menos del 20% por la caída de los precios y la producción.