Esa asignación económica se empezará a otorgar cuando culmine el proceso de dejación de armas, que se llevará a cabo en zonas veredales transitorias, y tomará 180 días contados a partir de la refrendación de los acuerdos.
Así, los exguerrilleros recibirán esa renta básica en los primeros meses de 2017.
Asimismo, obtendrán un solo importe de dos millones de pesos (690 dólares) correspondientes a una "asignación única de normalización", y cada integrante de las FARC tendrá derecho por "una vez a un apoyo económico para emprender un proyecto productivo por la suma de ocho millones de pesos (2.722 dólares)".
El equipo negociador de paz del Gobierno de Colombia también señaló que el fin de los acuerdos anunciado en La Habana es también una muestra de que el Gobierno les cumplió a los militares del país, quienes, finalmente, "son los ganadores" del proceso.
"Les hemos cumplido (…) Nuestros soldados y policías han sido los garantes en este conflicto, los que han garantizado la supervivencia del sistema democrático en Colombia. Debemos rendirles un homenaje, agradecerles", dijo el general Jorge Mora, integrante del Comité Técnico en La Habana.
El 24 de agosto, el Gobierno colombiano y la guerrilla de las FARC (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia) anunciaron que después de casi cuatro años de negociaciones terminaron de manera exitosa los diálogos de paz para poner fin a medio siglo de guerra en el país.
Ahora sólo resta que los ciudadanos respalden lo acordado a través de un plebiscito que se realizará el domingo 2 de octubre.
El conflicto armado colombiano, que ha enfrentado a guerrillas, paramilitares, agentes del Estado y grupos narcotraficantes, es el más antiguo del continente y ha dejado unos ocho millones de víctimas, así como 300.000 muertos, 45.000 desaparecidos y 6,8 millones de desplazados, según reportes oficiales.