"Les pido verificar el posible envío por parte de Petró Poroshenko de una porción de los ingresos de la empresa Roshen a grupos terroristas, los cuales intentan organizar actividades subversivas en Rusia", asegura la solicitud de Obujov.
Obujov denunció que, pese a que dirige actividades antirrusas, en particular las de grupos subversivos responsables de planear acciones terroristas en Crimea, el presidente ucraniano sigue recibiendo los ingresos de su fábrica de chocolate, ubicada en Rusia.
Roshen es uno de los fabricantes de este producto más grandes del mundo, con una producción anual de 450.000 toneladas. La compañía posee factorías en Ucrania, Lituania, Hungría y Rusia. Durante la campaña a la Presidencia de Ucrania, Poroshenko prometió vender su parte de la empresa en caso de ganar las elecciones. Hasta ahora eso no ha ocurrido.