"Habíamos advertido el uso de dinamitas y armas de fuego, porque seguramente los cooperativistas querían provocar una baja para luego echar la culpa a una acción de la policía", dijo Romero ante los hechos de violencia que se produjeron en la población de Panduro a unos 150 kilómetros de la ciudad de La Paz.
Los cooperativistas mineros habían advertido con el bloqueo de caminos exigiendo la modificación de la Ley Minera para acceder a la firma de contratos con empresas privadas para la exploración y desarrollo de las minas que están en sus manos.
Los efectivos policiales detuvieron dos vehículos de propiedad de los cooperativistas mineros que transportaba "gran cantidad de dinamitas", informó el Ministro.
Al referirse a las demandas del sector, la autoridad advirtió que estas vulneran la Constitución Política del Estado y no pueden ser atendidas.
"Hemos hecho conocer 31 contratos que firmaron los cooperativistas con empresas privadas extranjeras, ese es el fondo del conflicto. Se está desvirtuando el carácter social de las cooperativas mineras", apuntó Romero.
De acuerdo con el Ministerio de Minería, en Bolivia operan unas 1.700 cooperativas mineras, 1.400 de ellas dedicadas a la producción aurífera en los departamentos de La Paz, Santa Cruz (este), Beni (noreste) y Pando (norte).
El ministro Romero censuró la acción violenta de los cooperativistas mineros y convocó a sus dirigentes al diálogo.