"El Centro de Investigaciones y Desarrollo Nuclear que se construirá en El Alto permitirá, entre otras cosas, irradiar nuestra producción agropecuaria para que pueda ser exportada a mercados donde existen mayores controles y exigencias como los de Estados Unidos, Europa y Japón", señaló Berdeja.
"Bolivia tiene que saber aprovechar este centro de investigación para mejorar su producción agrícola", añadió Berdeja.
El experto también destacó el carácter pacífico del proyecto al señalar que es necesario cambiar la mentalidad respecto a que la energía nuclear está relacionada con la guerra.
"El IBTEN respalda y certifica su uso con fines pacíficos y de beneficio para la humanidad", continuó.
El Centro de Investigaciones y Desarrollo Nuclear de El Alto se instala en el país sudamericano con el apoyo de la empresa rusa Rosatom.
Berdeja señaló también que la planta de irradiación gamma que ayudará a conseguir la inocuidad de los alimentos será un impulso no sólo para la exportación, sino para la diversificación agrícola en el país.
Creado en 1983, el IBTEN cumple la función de regulador de todas las instituciones que trabajan con material radioactivo en el país en el marco de la ley de protección y seguridad radiológica y cuenta con el apoyo del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA).
