"Está claro por qué se hizo, porque (Ucrania) por alguna razón no quiere o no puede cumplir los acuerdos de Minsk", dijo.
El líder ruso agregó que Kiev planeó los ataques también por no poder explicar a la población sus errores en la política social y económica.
"Parece que nuestros socios de Kiev tomaron la decisión de agravar la situación", afirmó.
El presidente Vladímir Putin calificó de "alarmante" esta información y llamó a Occidente a influir en el régimen ucraniano para que cese las provocaciones.
Las autoridades rusas redoblaron las medidas de seguridad para proteger a los ciudadanos y las infraestructuras vitales de la península.
El Gobierno ucraniano, por su parte, negó su implicación en los actos de sabotaje frustrados y puso en alerta a sus tropas en la frontera con Crimea y en la línea de separación con las milicias en Donbás.
Crimea se escindió de Ucrania y se adhirió a Rusia tras celebrar en marzo de 2014 un referendo en el que más del 96 por ciento de los votantes avalaron esta opción.