La escultura de bronce de la emperatriz se yergue sobre un pedestal de granito, en cuyos partes laterales aparecen las estatuas de varios príncipes y jefes militares rusos que tuvieron que ver con la adhesión de Crimea a Rusia.
"Al recuperar este monumento a la gran emperatriz rusa, que hizo un inapreciable aporte a la historia de Rusia y de Crimea, estamos restableciendo la justicia histórica", dijo Aksiónov al intervenir en el acto inaugural.
El monumento tiene una altura de 10 metros y pesa 7 toneladas, en el reverso de su pedestal se puso una inscripción que reza: "El monumento fue reconstruido con motivo de la reunificación de Crimea con Rusia en 2014".
— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) 23 июня 2016 г.
Para reconstruirlo se anunció una recolecta pública de dinero, gracias a la cual se pudieron reunir 47 millones de rublos (casi 800.000 dólares).