Las fuentes del diario destacan que varios oficiales dentro del FBI y otras agencias de inteligencia de EEUU han indicado que el ataque fue llevado a cabo por hackers vinculados con Rusia.
Anteriormente, la congresista Nancy Pelosi calificó el ataque como el "Watergate informático".
"Yo sé exactamente que fueron los rusos. Estamos estimando los daños", puntualizó, sin mostrar algún tipo de pruebas.
También en la cuenta en Twitter de la página fundada por Julian Assange apareció uno de los documentos con la información sobre la campaña electoral del senador Bernie Sanders —exrival de partido de la candidata demócrata Hillary Clinton—.
Los 19.252 correos publicados por WikiLeaks revelan cómo el partido favoreció a Clinton en las elecciones primarias y buscó desacreditar a su principal contrincante.
La presidenta del Comité Nacional del Partido Demócrata, Debbie Wasserman Schultz, se vio obligada a anunciar su dimisión tras la filtración de correos electrónicos.
Por su parte, un representante de la sede electoral de Clinton afirmó que los servidores fueron hackeados por piratas informáticos rusos, lo que, según él, comprueba las intenciones de Moscú de ayudar al candidato republicano, Donald Trump en su carrera presidencial.
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A su vez, el Kremlin calificó de absurdas las acusaciones del partido estadounidense.
"Seguimos contemplando los intentos de usar el tema ruso en la campaña electoral de EEUU. Esa información absurda fue de inmediato desmentida por la familia del conocido candidato a la presidencia", aclaró Peskov.