"La perspectiva para 2017 es menos positiva", señaló el analista de DW, Matt Cook, en una nota remitida a Sputnik Nóvosti.
Entre los factores contribuyentes al exceso de producción, Cook apunta a proyectos offshore que fueron autorizados antes de la caída del precio del crudo y que comenzarán a entrar en operación en 2017.
De acuerdo con el experto en el sector, el conjunto de nuevos yacimientos "llevará a un aumento de 1.8 millones de barriles diarios de petróleo extraído offshore y a un aumento global de 2.1 millones de barriles por día".
"Aunque no es seguro que esto empuje de nuevo los precios a la baja, retrasará muy posiblemente la recuperación hasta una fase más avanzada en la década", proyectó.
Cook calcula que en la situación actual la producción de crudo offshore alcanzará un pico de 29.1 millones de barriles por día en 2019 y experimentará un lento declive en la década siguiente.
Entre los nuevos proyectos offshore menciona las operaciones en los campos de Kashagán en el Caspio Kazajo, además de en Oriente Medio y el Mar del Norte.