Así se desprende de un tuit publicado por el grupo SITE, organización no gubernamental que se dedica al monitoreo de la amenaza yihadista.
Una explosión suicida se produjo en el hospital de Quetta donde había sido trasladado el cuerpo del presidente de la Asociación de abogados de Baluchistán, Bilal Anwar Kasi, asesinado horas antes.
La autoría del atentado kamikaze, que causó al menos 70 muertos y más de 100 heridos, fue reclamada inicialmente por una facción del grupo Talibán en Pakistán, Jamaat ur Ahrar.